Comer con brackets puede ser un tremendo problema sobre todo cuando estamos fuera de casa y no tenemos al alcance nuestro cepillo dental y todo lo demás.
Que los residuos de comida queden atorados en los brackets puede traer incomodidad tanto a los que nos ven como a los que usamos, en nuestra imagen y al hablar también.
Aquí te resuelvo ese dilema.
Lo primero es saber que es una nueva forma a la que deberemos adaptarnos. A unos les llevará menos tiempo ambientarse y a otros puede que más.
Otra cosa muy importante, antes de comenzar con la hora de la comida, es saber que hay alimentos que pueden ser más difíciles de limpiar, de una a otra persona pueden variar. Esos alimentos los puedes identificar tú mismo y elegir cuales vas a comer en determinada ocasión.
Estas son las reglitas básicas que puedes seguir para que no te moleste comer fuera de casa ni incomode a los demás en la mesa:
- Corta en pequeños pedazos la carne. Sobre todo, si es res.
- Trata de llevar la comida hacia las muelas en todo momento.
- Limpia tus brackets a medida que vas comiendo: si lo haces así será mucho más fácil y disimulado.
- Evita llevarte a la boca grandes cantidades de comida.
- Mastica bien los alimentos.
- Si es necesario puedes pasar al baño y enjuagarte la boca con agua. Si has seguido todas las anteriores reglas, tu sonrisa quedarálista y presentable para tus fotitos después de almorzar.
Los colores claros en los brackets tienden a cambiar de color o a teñirse con algunas comidas. Si te desagrada que eso pase es un buen punto para tomar en cuenta.
Dicen que hay alimentos que se pueden y no se pueden comer con brackets. Yo pienso que va a depender del cuidado que cada persona tenga con ellos. Solo evita alimentos duros, que necesiten que los rompas o que los muerdas con la cara de tus dientes.